Birchbox: La caja digital de la belleza se muda a una tienda en Paris

tienda Birchbox en París
  • La experiencia de compra es la clave para saltar del ‘on’ al ‘off’


  • Las ‘millenials’ que se suscriben duplican su gasto en belleza a los 6 meses

Del mundo online a una tienda en París. Quién le iba a decir en 2010 a Katia Beauchamp y Hayley Barna -compañeras en laUniversidad de Harvard (EE UU) y creadoras de Birchbox-, que iban a emprender en un negocio que iba a cambiar por completo la forma de consumir belleza de miles de mujeres.

Lo que empezó como una startup online, que cada mes surtía a sus suscriptoras con una caja de cinco novedosos productos en miniatura para su cuidado, se convierte ahora en una realidad palpable que aterriza por primera vez en Europa mediante la instalación de una tienda en París.

Pero ¿por qué traspasar las barreras de lo digital para meterse en las complicaciones de la venta física? ¿por qué arriesgar en la capital de la cosmética si Birchbox envía cada año 12 millones de cajas?. La respuesta es parecida para todos los negocios que nacieron desde lo digital y que en los últimos tiempos han dado el salto al mundo físico: por la experiencia.

Amazon o Alibaba ya han hecho esta apuesta por la tienda física en otras capitales del mundo Clic para tuitear

Gigantes como Amazon o Alibaba ya han hecho esta apuesta por la tienda física en otras capitales del mundo y ahora Birchbox, tras el éxito de su tienda neoyorkina que lleva en funcionamiento desde 2014, se lanza con un local decorado con cálidos tonos pasteles, lo que reproduce un ambiente hogareño que favorece el que la clienta se sienta “como en casa” mientras adquiere sus productos.

Es una estrategia que replica todo el viaje experiencial de la compradora desde su casa, solo que en esta ocasión el producto está al alcance de su mano, y a esto hay que darle valor.

Ese plus que otorga el mundo ‘off’ se traduce en este caso en un establecimiento que cuenta con una zona de mesas y sofás -que será próximamente una peluquería y zona para beauty parties-, aunque esta última serán solo para influencers.

Las tiendas también trasladarán a su comunidad del ‘on’al ‘off’ ofreciéndoles el poder elaborar sus propias cajas con productos que no puede adquirirse a través de internet. De esta manera, podrán conocer productos diferentes, que además están categorizados en el mismo orden que en la página web: por tipo de producto, que no por marca, lo cual facilita la búsqueda a las clientas.

Pueden elaborar sus propias cajas con productos que no pueden adquirirse en internet Clic para tuitear

Uno de los grandes éxitos de Birchbox durante su trayectoria ha sido la posibilidad que ofrece a las marcas tradicionales de conectar con consumidoras más jóvenes, pues el 60% de ellas son milenialls. Y verdaderamente, impactar a este público funciona porque seis meses después de suscribirse a Birchbox duplican su gasto en belleza.

Permite a las marcas tradicionales conectar con consumidoras más jóvenes, que son prescriptoras Clic para tuitear

Por otro lado, el disponer de una tienda física permitirá a la firma de belleza el conectar con potenciales clientas que no están familiarizadas con el mundo digital. La conexión del ‘on y el off se materializa igualmente en la atención de las dependientas en tienda: una vez entras, una de las vendedoras te solicitará el correo electrónico para generarte una ficha, ofrecerte una atención personalizada y a la vez evitar que se envíen productos similares en tu caja, si eres suscriptora online.

París no será la única ciudad europea donde tome tierra Birchbox con una tienda física, aunque previo a ello la compañía llevará a cabo sus pruebas y test en corners de grandes superficies. En el caso de París, estas pruebas se llevaron a cabo en las Galerías Lafayette.