Después de las elecciones al Parlamento Europeo, celebradas el pasado domingo, podríamos sacar conclusiones positivas con respecto a las tasas de participación, ya que se frenó la caída continuada observada en los últimos diez años. Pero, esta mejora en el número de votantes se ha producido a costa de un aumento en el peso de los partidos no tradicionales, que podrían superar el 25 % del Parlamento.
Desde el Foro Internacional de Marketing creemos que todo esto podría ser positivo para la integración: los grandes partidos políticos pueden tratar de anular a los disconformes en el Parlamento Europeo uniendo sus fuerzas y acelerando el proceso de integración.
La situación actual es que nos encontramos ante un Parlamento más disperso, con una mayor diversificación en diferentes partidos, donde será necesario más que nunca la flexibilidad en las posiciones para alcanzar acuerdos. Además,
existe la posibilidad de que muchos de estos partidos, con posiciones bien diferentes, se anulen entre ellos dejando más margen de gobernar de lo que parece.
En definitiva, se observa una relativa calma en los mercados ante un resultado electoral complejo y novedoso que tendrá evidentes potenciales implicaciones negativas a medio plazo.