A veces se toman caminos erróneos en el día a día profesional. Decisiones que parecen acertadas por un momento, pero que el día de mañana comprobamos que no lo eran tanto. Sin embargo, hay algo peor, y es tomar una alternativa y continuar apoyándola en el futuro, cuando realmente no es la estrategia debida para nuestros intereses.
Es el caso de dos profesionales relacionados con FEVAMA, la Federación Empresarial de la Madera y el Mueble de la Comunidad Valenciana, que en dos momentos distanciados temporalmente en cinco años, se han mostrado reticentes a la entrada de Ikea en esta comunidad.
Sentencias como “Que venga Ikea es malo para el sector del mueble” por parte de Vicente Folgado, presidente de FEVAMA, da una idea de la mala estrategia de marketing que son capaces de llevar desde la Federación. Quizá se le pueda dar cierto margen de error y posibilidad de rectificación, a la vista de que el gigante del mueble no deja de ser un aliado en este sector. Sin embargo, lejos de retractarse, cinco años después, el presidente de los comerciantes del mueble y también participante en FEVAMA, Víctor Grafiá, regaló otra perla como la siguiente: “Nos llaman de toda Europa para saber cómo hemos parado a Ikea”. Sin duda un síntoma de que aún no han entrado en la estrategia debida.
Aprovechar la oportunidad
Bien es cierto que Ikea copa los primeros puestos en venta de muebles y decoración. Que es uno de los grandes. Que lidera el mercado y el sector publicitario en este ámbito. Pero hay que ser conscientes de que en la estrategia de mercado hay que interpretar cada movimiento, hay que beneficiarse de cada posibilidad, y esto no lo han hecho desde FEVAMA. El hecho de que Ikea lidere el mercado introduce en la sociedad el concepto de “temporalidad”, la costumbre de cambiar los muebles cada cierto tiempo y renovar la decoración. Y de esto precisamente deben beneficiarse los profesionales del mueble. Las costumbres introducidas por unos repercutirán positivamente en todos, y al final el cliente podrá elegir entre los dos tipos de empresas.
Por ello, desde FEVAMA deben apelar a la inteligencia del negocio e innovar su estrategia, fomentando la extensión del mercado, la integración de nuevas formas de venta y de nuevos conceptos. Todo ello, para que el día de mañana un consumidor, alentado por la idea de una necesaria renovación de sus muebles, entre en una tienda tradicional cualquiera, y realice una compra que no hubiera hecho si nadie le hubiera aconsejado que “donde caben dos, caben tres…”.