La ‘jubilación’ de David Beckham del fútbol no va a suponer una merma de ingresos para el mediático deportista. Al contrario, los expertos aseguran que ahora va a poder dedicarse por completo a la faceta profesional en la que sí es un auténtico líder: el desarrollo de su marca personal o ‘personal branding’.
El inglés se ha convertido en el más claro ejemplo de marca personal y su valor en el mercado se estima en tomo a los 500 millones de dólares. ¿Cuál es el secreto por el que este futbolista, que no es el mejor en el terreno de juego ni tampoco el más atractivo de cuántos se dedican al fútbol profesional, haya alcanzado las cotas más altas vendiendo su imagen? En este artículo te acercamos a las claves del Personal branding y sus grandes logros en la sociedad actual.
Aunque los deportistas son los reyes del personal branding por excelencia, no son los únicos que consiguen grandes beneficios al vender su imagen como si de una marca comercial se tratara. Crear una marca personal que realce al personaje y lo convierta en un peculiar ‘producto comercial’ no es una cualidad exclusiva de ningún perfil profesional o personal.
Para un deportista, al igual que para cualquier otro personaje público, peor que tener una mala imagen es no tener ninguna. El Personal Branding es un concepto de desarrollo personal que consiste en considerarse uno mismo como una marca. Esta marca personal debe ser elaborada, transmitida y protegida, con ánimo de diferenciarse y conseguir mayor éxito en las relaciones sociales y profesionales.
Aunque surgió como una técnica para la búsqueda de trabajo a finales de los noventa, el personal branding ha ido ganando protagonismo ya que, a diferencia de otros enfoques que tienden a la mejora de las características personales, con la creación de una marca personal se busca la promoción personal a través de la percepción que lo demás tienen de uno. En este reto, la comunicación juega un papel protagonista, tanto si hablamos de comunicación directa o de comunicación a través de los medios de comunicación. Entre ellos, las redes sociales han abierto infinitas vías para potenciar perfiles personales de las más diversas características y procedencias.
Claves para establecer una marca personal
- Concienciación- Conocer los puntos fuertes y débiles de la persona.
- Diferenciación- Destacar los aspectos concretos que le hacen diferente con respecto a otros perfiles profesionales.
- Identificación- Definir con qué variable empresarial se quiere identificar al personaje cuya marca personal se va a desarrollar.
- Atribuciones- Identificar variables, comportamientos y actitudes que refuercen sus elementos diferenciales en relación con su perfil.
- Contenidos- El valor diferencial debe ir respaldado por un contenido sólido que ayude a potenciar la imagen de marca.
- Canales- Buscar canales bidireccionales para interactuar con su mercado. Hay que generar feedback.
- Aprovechar– la experiencia del profesional para servir de motivación en áreas determinadas.
- Gestionar– las emociones que esa experiencia provoca.
- Actualizar- Estar en permanente actualización, adecuándose al mercado como si de una marca se tratara.
