Brecha de género: a este ritmo en 217 años la igualdad será real

La brecha de género en 2019
  • La diferencia salarial media en España es de un 22,35%


  • Las mujeres tienen una menor tasa de empleo

A igual trabajo, igual salario, una afirmación que parece lógica en la actualidad, pero que como indican todos los datos no se cumple del todo.  La brecha de género sigue siendo un tema de debate público y que salta a todas las portadas cada 8 de marzo con motivo del Día Internacional de la Mujer.

A pesar de que se han hecho grandes avances en materia de diversidad e inclusión, el Foro Económico Mundial alerta de que si se mantiene el ritmo actual serán necesarios 217 años para alcanzar la plena igualdad.

El último informe del INE indica que la brecha salarial media en España es de un 22,35%, aunque hay sectores como el científico y técnico en el que llega al 32,23%.

Por otro lado, los datos del Índice de Brecha Global de Género del Foro Económico Mundial colocan a España en la 29ª posición en este aspecto. Este indicador, lanzado en 2006, mide la diferencia entre hombres y mujeres en términos de salud, educación, economía e indicadores políticos.

El estudio presentado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) no trae muy buenas noticias, denuncia que en los últimos veinte años la brecha de género entre trabajadores y trabajadoras no se ha reducido significativamente. Entre los factores que hacen que ellas cobren menos que ellos a final de año destacan los complementos salariales.

Esta desigualdad afecta más en los contratos indefinidos  y a las mujeres que superan los 65 años y deben permanecer en su puesto para obtener una jubilación contributiva.

Liderazgo femenino

El famoso techo de cristal es otra de las razones que amplía los problemas en cuestión de igualdad retributiva. La presencia femenina en cargos de responsabilidad, tanto en el sector público como privado, es mucho menor que la masculina.

Aun así las mujeres suponen más de la mitad de los estudiantes de grado en la actualidad, pero tan sólo ocupan un 12% de los puestos de alta dirección de las compañías del Ibex 31. Algo que lleva a pensar que la educación y las aptitudes no son la razón principal para que esto ocurra.

Como dato positivo cabe destacar que España ha reducido al 20% las empresas que no tienen ninguna mujer al mando, lo que la coloca en el puesto 23 de los 35 países analizados por Grant Thornton.

Además, varios estudios revelan que la cultura corporativa igualitaria promuve el crecimiento y los entornos innovadores.

El síndrome del impostor

Las mujeres se exigen cumplir con un 95% de las aptitudes en un puesto de trabajo, mientras los hombres solo el 60%. Un dato curioso que hace que trabajadoras con carreras brillantes sientan cierta culpabilidad al alcanzar un puesto determinado. Una situación conocida como síndrome del impostor y que hace que ellas se quiten méritos profesionales.

La discriminación de las mujeres en los procesos de selección

Una investigación realizada por la Universidad Pompeu Fabra ha revelado que las mujeres tienen un 30% menos de probabilidades de ser contratadas frente a hombres con características similares.

En cuanto a las circunstancias personales, las madres son las que se llevan la peor parte, tienen un 35,9% menos de posibilidades de ser llamadas para una entrevista de trabajo en comparación con los hombres que tienen un hijo.

Números que explican la situación del mercado laboral donde el sector femenino tiene menor tasa de empleo y son más las que trabajan a tiempo parcial.

La brecha de género más grande está en el trabajo no remunerado

El mayor problema con el que se encuentran las trabajadoras es la carga de trabajo doméstico, el reparto entre las tareas del hogar sigue siendo desigual a pesar de que los hombres han asumido más funciones en casa.

El cuidado de niños, ancianos y personas dependientes sigue recayendo en su mayor parte en la mujer, algo que complica la conciliación con su crecimiento profesional.