Sensaciones frente a productos

De vender un coche exponiendo su seguridad, la potencia que ofrece o el sistema de frenado hemos pasado a presentar al vehículo como un espacio cómodo, confortable donde evadirte de los problemas dándote al placer de conducir… Sensaciones frente a productos. Es lo que se estila en publicidad y es lo que hay que adoptar si uno no se quiere quedar atrás en el escaparate del mercado. Pero esta tendencia no se ha estilado sólo en los productos. Afecta también a los servicios. Recogemos las declaraciones de Rosa María García, presidenta de Microsoft España que avalan esta tendencia y que recientemente recogió el diario Cinco Días.
¿Cree que las pymes se están posicionando bien en el comercio electrónico?
Pienso que la gente no ha entendido aún qué es Internet y cómo se  está desintermediando al usuario de la empresa. Antes, cuando ibas a comprar a una tienda, el vendedor te transmitía con su personalidad, con el aspecto del local, etcétera, las cualidades de su negocio. Ahora eso ha cambiado.
¿Cuál sería el nuevo planteamiento?
Debe intentar responder a varias preguntas, como en qué se diferencia mi oferta de las otras y cómo traslado que yo soy el que da más calidad, más garantías. Hay que dar con fórmulas que recuerden esta transmisión de experiencias. Si te presentan el producto igual, compras donde el precio es más bajo. Eso no es lo que se hace cuando eliges ir a una tienda, compras donde tienes una sensación especial. En internet hay que plantearse dos cuestiones. La primera es que tiene que haber capacidad para hacer una gestión completa: cómo se compra, cuándo llega el producto… La segunda, y muy importante, es que debe procurarse crear experiencias, cómo hago yo para que mi web transmita a un cliente que ya no va a acudir a mi negocio, las características distintivas y las sensaciones que tenía cuando entraba en la tienda.
¿Y qué se está haciendo en este sentido?
La verdad es que en general bastante poco. Se hacen cosas que no transmiten nada. Planteamientos como estar porque hay que estar y poco más.