Microsoft está inmersa en una reorganización profunda según la prensa estadounidense. Se espera que su consejero delegado Steve Ballmer la presente en los próximos días. Cambios en las principales líneas de negocio como empresas, hardware, aplicaciones, servicios y sistema operativo, en la que pretende profundizar en la integración entre la versión tablet/PC y Windows Phone, serán los ejes principales de esta nueva estrategia, con los que se espera plantar cara de manera sólida a Apple y Google.
Entre los cambios se apuntan la entrada en hardware, de manera aún más decidida tras la salida de su tablet Surface, con la adquisición de Dell o Nokia, la potenciación de las aplicaciones y el desarrollo de una mayor integración entre los sistemas operativos Windows y Windows Phone. Estos posibles cambios hacen que se vislumbre la entrada de nuevos directivos que impulsen las nuevas apuestas, coincidiendo con este cambio de estrategia.
En su búsqueda de aliados en el mercado, otra empresa que ha llegado a un acuerdo con Microsoft es Telefónica, que impulsará las ventas de los terminales con sistema Windows Phone, con el fin de arrebatar a Apple y Google el duopolio. El operador impulsará la venta de estos dispositivos en Reino Unido, Alemania, España, México, Brasil y Chile.
Estos cambios pueden ser un punto de inflexión para Microsoft que poco a poco va recuperando posiciones en el mercado tras la entrada fulgurante de nuevos players en el feudo que tradicionalmente había sido suyo. La estrategia sigue marcando el éxito o fracaso de las compañías y con este cambio de óptica, Ballmer quiere recuperar el tiempo perdido, que en su caso ha sido mucho.
