Menos marcas en los lineales

Estamos inmersos en una nueva etapa, donde la crisis, ha cambiado los hábitos de consumo de los españoles y consecuentemente las cadenas de distribución se han visto obligadas a modificar sus políticas de productos.

Durante los siete años de crisis, los consumidores se han visto motivados por una cultura low-cost, buscando siempre los mejores precios debido a la caída de su nivel adquisitivo. Esta nueva tendencia ha disparado el consumo de marcas de distribuidor, con precios mucho más competitivos que las primeras marcas.

Según un estudio del Esade Brand Institute, el número de referencias en las principales 15 cadenas de distribución en España ha caído un 3% durante la crisis. El surtido de gran consumo se ha reducido, siendo las marcas de fabricante las que más se han visto afectadas, llegando a perder un 9% de presencia, mientras que las marcas blancas han aumentado su presencia en un 15%. Esta situación ha hecho que las grandes marcas hayan cedido cuota de mercado a las marcas blancas, pasando de un 73% en 2007 a un 68% en 2013.

Mercadona, Lidl y Dia son las cadenas con menor peso de primeras marcas en sus lineales.
En cuanto a la tipología de establecimiento, los hipermercados siguen la tendencia global con una caída del 3%, los supermercados con un 9% menos de surtido, y los establecimientos discount siguen una tendencia completamente opuesta. En cadenas discount, como Lidl o Dia, el número de referencias que ofrecen ha crecido un 19%.

Atendiendo al tipo de productos, Los frescos son los que más han crecido y los que han perdido peso en los lineales han sido los alimentos envasados y los productos de droguería.