Las ONG están viendo reducidos sus presupuestos en esta etapa en paralelo a los recortes que sufren las políticas públicas, la caída de la actividad de las empresas y el aumento del paro, y detrás de estos sus fuentes de financiación de estas organizaciones. Sin embargo, el contrapunto a la falta de financiación lo pone la solidaridad y el voluntariado.
Así se infiere del estudio El impacto de la crisis en las ONG elaborado por la Fundación Mutua Madrileña y que ha contado con la participación de cerca de 200 entidades no lucrativas. En concreto, el 84% de las ONG consultadas declaran haberse visto obligadas a reducir sus presupuestos.
Una consecuencia de la disminución de recursos es que más de la mitad de las organizaciones no lucrativas (el 55%) han tenido que renunciar al desarrollo de nuevos proyectos. Sin embargo, el informe destaca que los españoles son más solidarios ante la actual coyuntura socioeconómica, como señalan el 59% de las ONG, que aseguran haber aumentado su número de voluntarios.
La situación que están viviendo las ONG establece nuevas pautas en su trabajo, otras formas de solucionar necesidades presentes en la sociedad a través del trabajo de voluntariado y su posible aportación a la RSC de las empresas, una materia que necesita una nueva vuelta de tuerca para hacerla más cercana y real. Empresas y ONG deben colaborar más que nunca para, con los recuross presentes, aportar a la sociedad soluciones.