La crisis ha cambiado los hábitos de consumo

Las enormes subidas de impuestos, el paro y las miles de empresas que se han visto forzadas a cerrar han tenido consecuencias devastadoras en la renta disponible, en el ahorro y en el consumo de los hogares. Todas las partidas de gasto, como alimentación, comer fuera de casa, vehículos personales, vestir, compra de vehículos, ocio y cultura o tabaco han bajado de manera acusada. Sólo la educación superior y alquileres incrementan el gasto por su carácter más necesario.

La Encuesta de Presupuestos Familiares del INE, que esta semana ha mostrado los datos de 2012 así lo ha reflejado. Los españoles salen mucho menos a comer y cenar fuera de casa (un 28%) y gastan menos en el bar. También han reducido su presupuesto en ropa y zapatos, en herramientas, reparaciones o utensilios, pero pagan mucho más en alquileres reales y electricidad. Y el descenso del consumo de teléfono fijo se ha trasladado al móvil e internet.

El uso del vehículo también se ha reducido, también afectado por el paro registrado y también por la caída de ventas de vehículos (-60%). Por contra, si casi todas las partidas reducen la renta dedicada a ellas, otra partida que sube es la educación, casi un 10% desde el inicio de la crisis, lo que se explicaría por la necesidad de una mejor formación por parte de los jóvenes para poder competir en el mercado laboral.