España necesita retener el talento laboral

Según el Índice GTCI España ocupa el puesto 35 de 103, un ranking a nivel mundial que mide la capacidad para atraer y retener el talento. Nuestro país ha obtenido 52,08 puntos, seis por debajo de la media, en el estudio realizado por la escuela de negocios Insead junto a Adecco y el Human Capital Leadership Institute.

España ocupa el puesto 23 de los 38 países europeos analizados, por delante de Italia, Portugal y Grecia. Europa domina la lista mundial al situar a ocho entre los diez primeros (y a 14 de los 20). Suiza, Singapur y Dinamarca son los países que dominan la clasificación mundial.

Entre las 48 variables estudiadas, nuestro país sobresale en «calidad de las escuelas de gestión» (puesto 4), «densidad de médicos» (8), «matriculación en enseñanza superior» (10), en el de «mujeres parlamentarias» (12) y «productividad laboral por empleado» (17). Sin embargo, necesita mejorar en la «relación entre la paga y la productividad» (puesto 98), «empleo juvenil» (91), flexibilidad del mercado de trabajo (88) y «alcance de la formación personal» (80).

Estos datos arrojan que nuestra productividad ya se encontraría a un buen nivel en relación a otros mercados pero que no creamos puestos de trabajo ni retenemos a nuestros empleados.

Se requiere operar con estrategia y deben tomarse medidas para incentivar la contratación, que mejoren la remuneración si queremos retener el talento de alto valor, ya que la competitividad del talento también afecta a factores determinantes como las cifras de desempleo de un país, la inmigración, la educación o el crecimiento económico. Se trata de un elemento clave tanto para recuperar la prosperidad tras la crisis y disminuir las cifras de desempleo juvenil. De lo contrario, la mejora de la economía en esta nueva etapa será más lenta.