El redondeo del IVA

Tras la subida del del IVA (Impuesto de Valor Añadido) a partir del 1 de julio en nuestro país, muchos serán los aspectos que habrá que estudiar como consecuencia de esta medida, sobre todo a medio plazo. Una de las principales repercusiones que generará será el redondeo al alza que tendrá lugar en muchos productos, y que se notará especialmente en la lista de la compra.

Los expertos aseguran que, en muchos casos, regirá el precio psicológico terminado en 99 céntimos. Es decir, que si un producto tiene un precio de 23,9 euros, no se concibe que con la subida del IVA se quede en 24,3, sino que saltará al siguiente renglón de precio psicológico, 24,9. Y lo que es aún peor, en precios de altas gamas, no se cree que un abrigo pase de 200 a 204 euros… Etiquetar un producto encierra una determinada política de marketing, y habrá precios que contengan la subida, pero muchos otros la redondearán.

Alternativas
Existe otra modalidad, y es la de redondear sólo los productos “menos sensibles a la subida”. En este caso, algunos comerciantes redondean a 1,05 en lugar de 1,02 precios que antes eran de 1 euro, pero no redondean otros “más sensibles” a la subida, de manera que el impacto para el consumidor sea neutro (en el caso de que consuma de ambos productos en la misma proporción).

En ocasiones, muchos comerciantes han “aprovechado” la situación y presumen de no haber subido el precio del producto con la subida del IVA, pero hay que tener cuidado, pues muchos de ellos ya lo hicieron meses atrás. Incluso hay que ver si la no subida del IVA se da en productos que a los propios vendedores no les costó más (antes de la subida), por lo que sería lógico que no le aplicaran ese aumento.

En resumidas cuentas, el perjuicio recaerá directamente en el consumidor final, que será quien asuma los 290 euros de media por familia que costará esta medida, según las estimaciones de la OCU. Ante todo, precaución.