El aeropuerto del futuro

Los aeropuertos son un elemento importante dentro de la ciudad, aunque la experiencia ha demostrado que no siempre han logrado el efecto deseado de desarrollo o rentabilidad. En cambio, parece que el futuro convertirá los aeropuertos en pequeñas ciudades, donde la distribución comercial, el ocio y la restauración ganarán peso.

El aeropuerto del futuro pretende ser un foco de atracción dentro de la ciudad, un lugar a donde se acuda no solo para coger un avión sino para comprar, disfrutar nuestro tiempo de ocio y donde disfrutar de los mejores restaurantes. Las crecientes demandas de los viajeros, las nuevas tecnologías y la búsqueda del sector por generar nuevos flujos de ingresos están impulsando la necesidad de un replanteamiento del concepto de ecosistema portuario. La referencia actual es Changi, en Singapur, el mayor en ventas Duty-free del mundo. El 65% de sus ingresos proceden de las ventas en hoteles.

Entre los futuros modelos que destacan encontramos el aeropuerto como centro comercial de calidad igual o superior a los existentes en las ciudades que los acogen, disponibles para los clientes que no vayan a volar. Otro modelo es el aeropuerto como ciudad en miniatura, una entidad autosuficiente con espacios exclusivos comerciales, de ocio, restauración, exclusivos, generando su propia energía o productos. El tercero es como extensión de la ciudad, reflejando lo mejor de la cultura, la historia y la gastronomía de manera integrada.