Hoy comienza en Barcelona el MWCongress, la feria de tecnologías móviles más grande del mundo. A lo largo de sus cuatro días de duración, el evento contará con 70.000 visitantes y 1.500 empresas expositoras; se generarán 300 millones de euros de negocio, y se crearán 6.500 empleos temporales. Pero el MWCongress tan solo es la parte más visible de un proyecto mucho más relevante y ambicioso.
Cuando hace dos años la Ciudad Condal fue elegida Mobile World Capital (MWC) se adjudicó la sede de siete ediciones de la feria, pero a la vez se ganó el derecho a ser foco de una serie iniciativas que quieren convertir a Barcelona en la capital mundial de las tecnologías móviles, como París lo es de la alta costura o Detroit de la automoción. El objetivo es que este sector logre tal arraigo en la ciudad que se convierta en un elemento transformador de la vida cotidiana y generador de nuevas inversiones y oportunidades de negocio. Barcelona fue elegida entre 30 candidaturas para este proyecto que cuenta con apoyo institucional y del sector al más alto nivel.
La estrategia tiene cuatro pilares. El MWCongress empezó a celebrarse en Barcelona en 2007 y celebrará siete ediciones seguidas en la ciudad. El MWCentre Espacio Movistar es un espacio de exposición permanente ubicado en la plaza de Cataluña y que permitirá al público conocer los últimos avances del sector. El MWHub será el corazón industrial del proyecto, ubicado en el distrito 22@, busca transformar a Barcelona en ciudad puntera en la producción y diseño de aplicaciones móviles, despliegue de redes y creación de empresas del sector. Por último, el MWFestival es un programa de eventos culturales que se desarrollará a lo largo de todo el año.