Apple se abre al “low cost”

La compañía californiana no abandonará su lado más elitista pero ahora sí está dispuesta a embarcarse en otros proyectos que parecen lejanos de su aura de lujo, aunque sigamos hablando de teléfonos de gama alta. La compañía presenta hoy nuevos equipos como revulsivo para mantener su cuota de cara al cierre del año en su lucha con Samsung.

El iPhone 5C será el producto elegido para entrar a otro target que no quiera lo último sino algo funcional siguiendo la estela de Apple. Así el nuevo dispositivo parece que optará por abaratar costes en sus materiales, dejando el aluminio por el plástico y equipando un corazón anterior a la última generación que se presentará en próximos días, el iPhone 5S.  El resultado costará entre 300 y 400 dólares, lo que es la mitad del tope de gama actual.

El nuevo iPhone 5S será bastante más potente que el actual iPhone 5 y mejorará las cámaras instaladas  pero ¿será suficientemente revolucionario para Apple? Desde la muerte de Jobs, la marca de la manzana parece no saber cuál es el siguiente paso a dar y revolucionar el mercado, y mientras su competencia se frota las manos. En los últimos días, parece que la posible repsuesta sean los relojes inteligentes, aunque anteriores intentos fracasaron en su popularización ¿Es acertada la actual estrategia de potenciar productos existentes? ¿Apple necesita bajar sus precios para competir? Estas preguntas tendrán respuesta en los próximos meses.