El aeropuerto de Ciudad Real cerrará apenas tres años después de su apertura y tras una inversión de más de 700 millones de euros. Los administradores concursales informan al juez de su incapacidad para seguir operando tras el 29 de octubre.
Vueling, la única compañía que sigue operando en el Aeropuerto Central ha decidido marcharse de la infraestructura, ya que ninguno de sus dos enlaces (Palma de Mallorca y Barcelona) es rentable. El aeropuerto factura una cantidad pequeña, insuficiente para pagar las nóminas.
Las infraestructuras y transportes son uno de los pilares de la economía. Desde esta perspectiva se ha trabajado desde la gratuidad, habilitando aeropuertos donde, utilizando el sentido común, no harían falta.
A esto se suma la potenciación de la alta velocidad, que representa una amenaza para el transporte aéreo. La mejor moraleja puede ser que debemos ser serios. Potenciemos y gestionemos bien de lo que disponemos y dejemos de malgastar.