Ni en el colegio ni en la universidad se fomenta el discurso y la capacidad oral. Desde el momento en el que nos formamos para ser buenos profesionales mantenemos una visión ambiciosa, pero no sabemos a ciencia cierta el cargo que vamos a desempeñar en un futuro. Os mostramos la importancia de un buen orador.
En nuestro diccionario acuñamos el término glosofobia, el temor a hablar en público, que hoy en día constituye una de las grandes asignaturas pendientes de la alta dirección y de los mandos intermedios de las empresas españolas. Vivimos en el siglo de la comunicación y esto hace impensable que hablar en público represente un freno para los ejecutivos, los cuales agradecen la formación en oratoria pero no la pagarían de su bolsillo.
Desde Foromarketing pensamos que el gran profesional no solo tiene que serlo, sino parecerlo. Por ello os indicamos algunos consejos a tener en cuenta a la hora de dirigirse a una audiencia.
- Embauca a la audiencia con un principio prometedor pero no desveles todo tu discurso desde el principio.
- Regla del 3×3. Elige tres ideas y repítelas al menos tres veces en la presentación.
- Acaba con el protagonismo del Power Point. Reduce información de las transparencias.
- Bajo ningún concepto des la espalda a tus oyentes, utiliza un puntero para cambiar de estímulo a la audiencia.
- Mantén la seguridad en tus movimientos por el escenario.
