El Gobierno está terminando el diseño del Anteproyecto de Ley de Apoyo al Emprendedor, que quiere aprobar antes de Semana Santa. Entre las medidas estrella de esta Ley destaca la posibilidad de constituir una sociedad con tan solo un euro de capital social, frente a los 3.000 obligatorios para las sociedades limitadas en el momento actual. Además, sustituirá el actual sistema de licencias por declaraciones de responsabilidad de los nuevos empresarios, con lo que se agilizará el gran volumen de papeleo administrativo.
España se encuentra en la actualidad en el puesto 150 de países en los que es más fácil abrir una nueva empresa. Con la nueva Ley de Apoyo al Emprendedor, el Ejecutivo quiere facilitar la constitución de sociedades, clave para crear empleo y riqueza y hacer a nuestro país más competitivo. Un objetivo perseguido por todos los Gobiernos a lo largo de los últimos años y para el que se han propuesto numerosas iniciativas. Desde Foromarketing aplaudimos esta medida porque estamos convencidos de que para ganar en competitividad son necesarias leyes como ésta.
No obstante, hay un segundo aspecto fundamental, sin el que iniciativas como la que se está diseñando no se traducirán en los resultados esperados. Urge un cambio cultural en la Administración Pública. Las distintas administraciones tienen que ser conscientes de que la actividad empresarial es esencial para que el país avance y tienen que facilitar su actividad. La colaboración público-privada es objetivo prioritario para que las medidas de apoyo al emprendedor, como todas las demás, den sus frutos.
