El sueño empresarial de Antonio López y sus dos socios, podría asemejarse al de cualquier otro emprendedor que decide lanzarse a la incertidumbre de trabajar por cuenta propia. La diferencia es que la idea de negocio de su empresa, DOMO4M, parece sacada de una película del futuro. Sin embargo es tan real, que con el producto que ofrecen, cualquiera podría convertir su hogar en un espacio inteligente por menos de 2.000 euros.
Efectivamente, esto que se denomina domótica, ha sido tradicionalmente concebido como un sistema complejo, caro y solo apto para los privilegiados propietarios de mansiones. Y es precisamente este concepto el que Antonio (director general de la compañía) y sus socios quieren derrocar. “Nosotros ofrecemos un sistema de desarrollo propio, que como queremos transmitir es domótica para mortales, es decir, una instalación puntera, pero de fácil uso y ajustada en precio”, señala López.
Cualquiera podría convertir su hogar en un espacio inteligente por menos de 2.000 euros.
Tras la experiencia de dos décadas de los socios trabajando en Microsoft con la tecnología más avanzada, su director general comenta que de lo que se dieron cuenta es de que la tecnología avanzaba mucho más rápido de lo que verdaderamente “el común de los mortales” éramos capaces de asumir. “Apenas somos capaces de aprovechar todo el potencial que nos ofrecen los dispositivos que tenemos a diario entre manos. Usamos smartphones de última generación, más potentes que el pc que tenemos de hace 3 años, y sin embargo lo más para lo que lo usamos es para mirar Facebook”.
López explica que con el sistema que han puesto en el mercado –al que llaman el cerebro-, pretenden democratizar el acceso a la domótica y su vez hacer que todo el mundo acceda a las ventajas de lo que significa tener un hogar inteligente, “sin obras de instalación y con un ahorro importante en factura de los consumos”.
DOMO4M pretende democratizar el acceso a la domótica y que todo el mundo acceda a un hogar inteligente.
Cómo imaginar una casa en la que las persianas se abran y cierren según la hora del día en distintas estaciones de año, luces apagadas o encendidas según las necesidades de nuestras rutinas o la costosa calefacción. “El sistema es capaz de aprender de las rutinas que llevamos a cabo en nuestro hogar, y es verdad que el hombre es un animal de costumbres, pero de costumbres no exactamente iguales en todas las familias, por eso nuestro sistema puede adaptarse a cada caso”, expone Antonio López.
El sistema es capaz de aprender de las rutinas que llevamos a cabo en nuestro hogar.
Según estudios de la asociación de Robóticia y Domótica de España (ARDE) se puede ahorrar hasta un 27% en la factura con las soluciones domóticas, entre un 10 y un 12% solo con la calefacción y un 3%, si fuésemos capaces de desconectar todos esos aparatos que dejamos en stand-bye, como la televisión y otros dispositivos.
En este sentido, adicionalmente a los servicios de confort y eficiencia que aporta DOMO4M, también cabe destacar la pata de la seguridad. Así, los sensores de detección de presencia y las cámaras instaladas en el domicilio que incorporan estos dispositivos, tiene garantizada la protección de toda la familia. “Desde la app que hemos desarrollado puede controlarse todo el sistema, podemos ver las distintas estancias de la casa, controlar luces, ver quien está en cada habitación…y esto es especialmente interesante para personas con discapacidad”, indica el director general de DOMO4M.
Servicios de confort, eficiencia y seguridad.
En concreto Antonio López se refiere al programa piloto que están llevando a cabo con la asociación de Parkinson de Madrid, “podemos ayudar a estas personas a ejecutar las tareas más tediosas del día a día y a la vez aportar tranquilidad a sus familias. Ahora estudiamos además la integración de dispositivos biométricos a nuestro sistema que pudieran avisar si existe una caída o cualquier incidente”.
Para Antonio y sus socios su “cerebro” no tiene barreras para seguir desarrollándose y aportando más y más funcionalidades, porque su departamento de I+D no ha parado de trabajar desde que dieron sus primeros pasos hace año y medio y sus dispositivos son compatibles con todas las soluciones estándar. “De hecho, esa es una de nuestras fortalezas respecto a otros sistemas domóticos que se ofrecen en grandes superficies: nuestra capacidad de adaptación, y que nuestros técnicos se encargan de dejar instalado y configurado el sistema en una mañana; así de sencillo y sin que el propietario de la casa tenga que preocuparse de nada más”.
Pero según López, el sistema no solo está pensado para hogares, sino que existe una vertiente muy interesante y efectiva para empresas, que pueden automatizar las funciones de sus instalaciones, “casi que en más casos que el hogar”. “Por ejemplo, tenemos como cliente a una guardería que antes con unas instalaciones en las que una de las clases estaba orientada al norte y era muy fría. Por eso necesitaba enviar a una de sus empleada antes a trabajar,para encender la calefacción. Ahora, la domotización ha permitido que puedan encender y apagar la calefacción a la hora que necesiten y de forma individualizada por estancias, e incluso comprobar si las ventanas están cerradas”.
El sistema está pensado para hogares y empresas.
En poco tiempo de vida, DOMO4M ya ha sido capaz de aglutinar éxitos y premios. Como el otorgado por el Ministerio de industria como pyme innovadora, o la subvención europea por su contribución a la reducción de gases y energía limpia en el horizonte 2020. Un reconocimiento, este último, del que sienten especialmente orgullosos, “porque como solemos decir, la energía que menos contamina es la que no se genera”.
