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La marca se ha visto obligada a reposicionar su línea de negocio por la fuerte competencia.
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Espera encontrar una mayor rentabilidad en el ámbito profesional.
La división informática de Toshiba cambia de nombre en Europa. A partir de ahora, se llamará Toshiba Client Solutions. Este cambio muestra la nueva estrategia de la compañía japonesa, que abandona en toda Europa, su negocio de ordenadores para consumo, para centrarse exclusivamente en el mercado profesional.
El motivo que ha llevado a la marca asiática a tomar esta decisión es la fuerte competencia del sector. Marcas como HP, Lenovo, Acer o Asus han obligado a Toshiba a replantearse sus estrategias de negocio para tener una mayor rentabilidad en el viejo continente. Como era de esperar, esta decisión tendrá un efecto negativo en la plantilla de su filial, que se reducirá de 50 a 30 empleados.
El abandono del negocio de portátiles de consumo en España se produce pese a que, según Emilio Dumas, responsable de Toshiba en España y Portugal, este era uno de los países más fuertes de Europa en este segmento para la marca. Sin embargo la compañía parece tenerlo claro, y es que solo venderá portátiles a clientes particulares en los dos países donde este negocio les resulta más rentable, Japón y EE UU.
Dumas cuenta que en el mercado profesional se fidelizan clientes, hay repetición de compras y servicios asociados en los que se puede conseguir rentabilidad. “Y aquí los ordenadores que se venden son gamas medias y altas, donde somos muy buenos”.
La matriz japonesa de Toshiba presentó hace unas semanas las cifras de su último ejercicio, con unas pérdidas récord de 4.400 millones de dólares, diez veces más que las del año anterior. La compañía también ha efectuado 7.000 despidos en todo el mundo. Todo después de que la firma nipona fuera condenada por fraude contable. Con todo, Dumas cuenta que la compañía está preparada para dar la batalla. “Próximamente mandaremos una carta a nuestros clientes firmada por un vicepresidente de la división informática donde explica que, tras años complicados, la compañía está simplificando sus estructuras corporativas”. La misiva también indicará que la firma cuenta con el apoyo de los bancos japoneses y de sus accionistas “y que vamos a renacer y vamos a ser más robustos que nunca”.
Toshiba es un ejemplo de reposicionamiento de las estrategias de la marca, en este caso particular por sus malos resultados. La empresa espera conseguir una mayor rentabilidad especializándose en el sector profesional, donde espera tener mayores posibilidades frente a la competencia.
